... No te acuerdas de mi? Que pena, yo he venido a recordarte que los pecadores, desertores no son bienvenidos en el kar vidico.
..
...
-No soy un desertor, siempre he sido leal a mis luchas, no creo en la casualidad y Ajna me ha dado la bienvenida. Le respondí
-Sigues siendo tan arrogante como el primer día; levantate de esa silla y arrodillate ante mí... Si quieres marcharte con vida.
-No podré complacerte amigo, si no tienes nada más que decir, dejame en paz y sigue tu camino.
El gran hombre, se burló de mi a carcajadas macabras.
-Bueno entonces te sacaré a patadas, levantate de esa silla y enfrentate a mí. Me dijo con un rostro de psicópata que ocultaba toda su bondad
...Respiré...
-No peleare contigo amigo, soy pacifista.
¡¡Levantate de esa silla cobarde!!
Me gritó enfurecido mientras caminaba hacia mi, como una bestia dispuesta a embestirme con toda su furia.
Intente levantarme pero no podía mover las piernas ( producto del mana, supongo). La impotencia se apodero de mi ser. desvié la mirada a otra dirección y le dije:
-Comprendo que quieras golpearme, pero de que sirve que los hagas, si no recuerdo tus motivos, sientate en esta mesa y comentame tus razones. Por que no me levantare.
-Miramé cuando me hables! escoria del iblis!!
Me reí involuntariamente de sus palabras
-Tienes el cinismo de reírte? Me pregunto con furia
-No me estoy riendo de ti, soy un ser de luz y no quiero ser parte de este espectáculo.
Mis palabras aumentaron su ira. -Tu no eres un ser de luz. Balbuceo Aumentando la velocidad de sus pasos, desapareció y apareció al frente de mi. Lanzándome un golpe que milagrosa mente logre detener.
Segundos de silencio acompañaron al acto.
-No peleare contigo. Le volví a decir soltándole la mano.
Me lanzo una ráfaga de golpes, que logre esquivar de una muy forma muy ágil. Pero no fue suficiente y reposo su puño en mis mejillas...
caí de la silla como una hoja que cae arrastrada por la gravedad al suelo...
-Levantate príncipe es hora de su paseo matutino... Que son estas flores? Lirios... Dubko... Escuchaba en mi cabeza como un mantra, en mi intento de recomponerme, ignorando la sangre que emanaba de mis fosas nasales.
-Levantate y pelea contra mi!! Grito.
-¡¡DETENTE!! Le dijo mi alter ego sentado en la mesa. -solo tenemos dos mejillas.
El hombre la observo y comenzo a burlarse de ella... - Quien me va a detenerte? tú? Que se siente no saber si eres bueno o malo?
Golpeó la mesa abalanzandola contra ella... Está la desapareció a tocarla con su mano. Pero era demasiado tarde y el ser estaba cerca de mi, en su intento de patearme...
...
Una cálida luz se coloco entre nosotros expulsando al hombre que cayó al suelo como una enorme roca.
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-No soy un desertor, siempre he sido leal a mis luchas, no creo en la casualidad y Ajna me ha dado la bienvenida. Le respondí
-Sigues siendo tan arrogante como el primer día; levantate de esa silla y arrodillate ante mí... Si quieres marcharte con vida.
-No podré complacerte amigo, si no tienes nada más que decir, dejame en paz y sigue tu camino.
El gran hombre, se burló de mi a carcajadas macabras.
-Bueno entonces te sacaré a patadas, levantate de esa silla y enfrentate a mí. Me dijo con un rostro de psicópata que ocultaba toda su bondad
...Respiré...
-No peleare contigo amigo, soy pacifista.
¡¡Levantate de esa silla cobarde!!
Me gritó enfurecido mientras caminaba hacia mi, como una bestia dispuesta a embestirme con toda su furia.
Intente levantarme pero no podía mover las piernas ( producto del mana, supongo). La impotencia se apodero de mi ser. desvié la mirada a otra dirección y le dije:
-Comprendo que quieras golpearme, pero de que sirve que los hagas, si no recuerdo tus motivos, sientate en esta mesa y comentame tus razones. Por que no me levantare.
-Miramé cuando me hables! escoria del iblis!!
Me reí involuntariamente de sus palabras
-Tienes el cinismo de reírte? Me pregunto con furia
-No me estoy riendo de ti, soy un ser de luz y no quiero ser parte de este espectáculo.
Mis palabras aumentaron su ira. -Tu no eres un ser de luz. Balbuceo Aumentando la velocidad de sus pasos, desapareció y apareció al frente de mi. Lanzándome un golpe que milagrosa mente logre detener.
Segundos de silencio acompañaron al acto.
-No peleare contigo. Le volví a decir soltándole la mano.
Me lanzo una ráfaga de golpes, que logre esquivar de una muy forma muy ágil. Pero no fue suficiente y reposo su puño en mis mejillas...
caí de la silla como una hoja que cae arrastrada por la gravedad al suelo...
-Levantate príncipe es hora de su paseo matutino... Que son estas flores? Lirios... Dubko... Escuchaba en mi cabeza como un mantra, en mi intento de recomponerme, ignorando la sangre que emanaba de mis fosas nasales.
-Levantate y pelea contra mi!! Grito.
-¡¡DETENTE!! Le dijo mi alter ego sentado en la mesa. -solo tenemos dos mejillas.
El hombre la observo y comenzo a burlarse de ella... - Quien me va a detenerte? tú? Que se siente no saber si eres bueno o malo?
Golpeó la mesa abalanzandola contra ella... Está la desapareció a tocarla con su mano. Pero era demasiado tarde y el ser estaba cerca de mi, en su intento de patearme...
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Una cálida luz se coloco entre nosotros expulsando al hombre que cayó al suelo como una enorme roca.
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